Un familiar, un amigo del colegio, tu vecina de arriba, etc. Probablemente, conozcas a alguien que sufre esta enfermedad crónica, y es que es muy común. Nos referimos a la diabetes, una afección con la que muchas personas han aprendido a convivir, sin que sus posibles síntomas le afecten en su rutina diaria. Hoy en nuestro blog saludable te hablamos de esta enfermedad tan normal, pero a la vez tan desconocida para muchos.
La diabetes es una enfermedad crónica que aparece debido a que el páncreas no fabrica la cantidad de insulina que el cuerpo humano necesita, o bien la fabrica de una calidad inferior. La insulina es la principal sustancia responsable del mantenimiento de los valores adecuados de azúcar en sangre y, cuando falla, origina un aumento excesivo del azúcar en sangre (hiperglucemia).
El momento de aparición de la enfermedad, así como las causas y síntomas que presentan los pacientes, dependen del tipo de diabetes de que se trate. Te las presentamos en un breve resumen:
- Diabetes tipo 1. Las edades más frecuentes en las que aparece son la infancia, la adolescencia y los primeros años de la vida adulta. Se debe a la destrucción progresiva de las células del páncreas, que son las que producen insulina. Ésta tiene que administrarse artificialmente desde el principio de la enfermedad. Sus síntomas son el aumento de la necesidad de beber y de la cantidad de orina, la sensación de cansancio y la pérdida de peso.
- Diabetes tipo 2. Se presenta generalmente en edades más avanzadas y es unas diez veces mas frecuente que la anterior. Se origina debido a una producción de insulina escasa, junto con el aprovechamiento insuficiente de dicha sustancia por parte de la célula. Según qué defecto de los dos predomine, al paciente se le habrá de tratar con pastillas antidiabéticas o con insulina (o con una combinación de ambas).
- Diabetes gestacional. Se considera una diabetes ocasional. Se puede controlar igual que los otros tipos de diabetes y, a veces, este aumento no se produce y puede originar una diabetes por embarazo. Tampoco tiene síntomas y la detección se realiza casi siempre tras el análisis rutinario a que se someten todas las embarazadas a partir de las 24 semanas de gestación.
Cuando sufres esta enfermedad, siempre está controlada por los médicos, pero queremos darte unos consejos para llevarla lo mejor posible en tu día a día y que puedas tomar control sobre ella y sobre sus síntomas.
Los diabéticos tienden a tener menores niveles de vitamina C, posiblemente debido a que altos niveles de glucosa en la sangre afectan la absorción de dicha vitamina. Tomarla puede ayudarte. La vitamina E puede ayudar a prevenir enfermedades cardíacas, oculares y renales, que es una complicación común de la diabetes. Los diabéticos, especialmente los del tipo 1, también pueden ser deficientes en vitamina D; una dosis suplementaria puede mejorar la utilización de la glucosa y la salud de los huesos.
Consulta a nuestros profesionales si tienes cualquier duda o si necesitas un primer consejo sobre cómo tratar esta enfermedad.