¡Qué dulces son los niños! ¡Qué inocentes! ¡Qué espontáneos! Dice el dicho: “cualquier tiempo pasado fue mejor”. Y nosotros creemos que, en realidad, quiere decir que el mejor tiempo pasado de nuestra vida es la infancia. Esos años de despreocupación, cuando el asunto más importante del día era jugar y a qué ibas a jugar, cuando ensuciarte el babero era símbolo de que ¡lo habías pasado en grande!, cuando el “cole” era guay porque ahí estaban nuestros amigos, cuando sufríamos con las sumas y las restas, ¡cuando llegaron las multiplicaciones! La infancia es una etapa maravillosa de descubrimiento y aventuras.
Hoy, 20 de noviembre, es el Día Internacional del Niño y en Club Salud 24 horas no podíamos olvidarnos de todos ellos, de las sonrisas que nos regalan y de las grandes lecciones que cada día nos enseñan. Y este es nuestro pequeño gran homenaje a estos locos bajitos, porque sus sueños son lo más importante y porque tiempo atrás nosotros también fuimos ellos.
Hoy el protagonismo es de ellos, de los niños. Pero también es nuestro día. Un día en el que deberíamos recordar que también hemos sido niños, y hemos crecido. ¿Somos la persona que nuestro niño hubiera querido que fuéramos? Seguro que nuestro antiguo yo, más bajito y cabezón, habría querido que fuéramos superhéroe, astronauta, cowboy, princesa, reina o un hada. No se imaginaría que había más en el mundo que lo que lee en los cuentos de hadas o en las películas más clásicas de Disney.
Esa inocencia y dulzura de los pequeños infantes hay que conservarla y mantenerla todo lo posible. Porque es un bien preciado, escaso y con alta probabilidad de extinción. Cada año, este día nos recuerda que hay que cuidar esas cualidades que, a menudo, sólo se tiene en edades tempranas y nos invita a sentirnos, de nuevo, como los niños que fuimos.
«Todos hemos sido niños alguna vez. Y todos deseamos por igual el bienestar de nuestros niños, que siempre ha sido y seguirá siendo el anhelo más universal de la humanidad». Es el lema con el que las Naciones Unidas nos da la bienvenida en su página web para rendir homenaje a todos los niños del mundo, especialmente a los más necesitados. Pero este año, la organización centra todos sus esfuerzos en los millones de niños que se han visto afectados por el tifón Haiyan sucedido en Filipinas hace a penas unas semanas.
¡Por todos ellos y porque ningún niño se merece sufrir, hoy gritamos en voz alta ¡FELIZ DÍA INTERNACIONAL DEL NIÑO!
