La enfermedad cardiovascular ya no se considera una enfermedad que afecta sólo a los hombres. Debido a la complejidad de su anatomía en las mujeres es más difícil obtener un diagnóstico precoz, por lo que es fundamental prestar atención y solicitar revisiones regulares.
El índice de pacientes con enfermedades del corazón va en aumento y, cada vez se registran más casos que afectan de forma específica a las mujeres.
Las mujeres presentan síntomas diferentes a los hombres, las grandes entidades de salud han lanzado una llamada de atención para que todas estén bien informadas al respecto.
Las mujeres pueden desarrollar una enfermedad cardíaca hasta 10 años más tarde que los hombres.
Cuando las mujeres llevan hábitos de vida relativamente saludables, hacen ejercicio regular y no fuman, están protegidas contra las enfermedades cardíacas hasta, más o menos, los 50 años de edad o con premenopausia y salvo casos de diabetes o un alto nivel de colesterol.
Las lesiones en las arterias del corazón y carótidas, llamadas disecciones espontáneas, son raras pero mucho más comunes en las mujeres, especialmente antes de la menopausia. Se supone que las diferencias hormonales son las causantes de dichas lesiones.
Igualmente, existe un síndrome relativo al corazón que viene provocado por factores de estrés, tanto físico como emocional, que imita un ataque al corazón (Síndrome de Taku-Tsubo), más común en las mujeres.
Sin embargo, en la actualidad muchas mujeres jóvenes están en un alto riesgo debido a la mala alimentación, la obesidad y condiciones adicionales que comprometen la salud de este órgano.
Se ignoran síntomas de problemas cardíacos, pueden ser equivocados…
Las mujeres tardan más tiempo en consultar al médico por su salud cardíaca en comparación con los hombres. Los síntomas, por lo general, son menos evidentes y suelen tener similitudes con otras dolencias. Además, hay muy pocos casos en los que, en el caso de existir antecedentes familiares, se hacen los chequeos médicos oportunos.
Los síntomas en las mujeres pueden diferir, no sólo se aprecia el clásico dolor en el pecho.
· Náuseas.
· Sudores.
· Palidez repentina.
· Ansiedad.
. Fatiga.
· Problemas respiratorios.
Cualquiera de estos síntomas, puede ser señal de una posible enfermedad cardíaca. Si muestras, dos o más al mismo tiempo, se aconseja consultar cuánto antes al médico.
¿Cómo podemos prevenir futuros problemas cardíacos?
Se pueden prevenir adoptando un estilo de vida saludable. Dietas ricas en alimentos de origen vegetal, una rutina diaria de ejercicios, dominio del estrés, una buena calidad de sueño y prescindir del tabaco definitivamente. Todo en conjunto, puede disminuir el riesgo de infarto alrededor del 90% y de ictus o derrame cerebral, en un 60%.
El dolor en el pecho, en el caso de mujeres diabéticas, debe ser inspeccionado de urgencia.
– En nuestras manos está, el lograr bajar estas tasas de enfermedades del corazón y evitar muchas de las muertes asociadas a la misma.
Lo más importante es tu salud y la de los tuyos…