Cuando hablamos del Molluscum contagiosum no nos referimos a una especie de almeja marina, aunque pueda parecerlo. Ésta, igual que las verrugas, es una infección de la piel provocada por un virus. Se trata de una afección benigna con una autolimitación temporal, es decir, pasado un tiempo desaparece sola. Aunque al no ser agradable a la vista, es recomendable acudir a tu farmacia para buscar algún remedio.
Se manifiesta en forma de granos o bultos de pequeños tamaño con un aspecto perlado que se concentran alrededor de lo que llamamos un “centro deprimido”, algo así como un ombligo. No suele presentar muchos síntomas y afecta especialmente a los niños aunque también a los adultos.
En la mayoría de los casos, afectan a una sola persona del grupo familiar y a pesar de que el contagio es posible, por ejemplo por contacto directo de la piel con las lesiones o el uso común de utensilios como toallas, prendas, calzado, etc., la aparición de un brote es poco habitual. ¡Mucho cuidado con las piscinas! En estos lugares también es posible adquirir la afección del molusco.
Las lesiones pueden desaparecer espontáneamente -y, además, no deja cicatriz-, sin embargo, en algunos casos, se mantienen activas durante años, así que para evitar el contagio o la autoinoculación, un profesional de la salud siempre recomendará su tratamiento. Una buena noticia es que las técnicas usadas para la eliminación del Molluscum Contagiosum son poco agresivas, pues es posible extirpar el núcleo central -responsable de la regresión espontánea- manualmente.
También se puede aplicar sustancias sobre la misma como los medicamentos de uso tópico con el que se eliminan las verrugas. Otra opción es quemarlas en frío (crioterapia) o extirparlas desde la base con una cucharilla pequeña de bordes afilados (curetaie). En cualquier caso, los resultados de estos tratamientos son excelentes y muy eficaces.
Para prevenir el Molluscum Contagiosum es vital evitar el contacto directo con las lesiones de la piel y no compartir utensilios del hogar; recuerda que, aunque el contagio sea inusual, no es imposible que suceda, por lo que es importante tomar todas las medidas de prevención posibles.
De no ser así, debes tener en cuenta que los condones femeninos y masculinos no pueden protegerte completamente, pues el virus puede alcanzar áreas no cubiertas por el preservativo. Por otro lado, una medida más extrema sería la de evitar las relaciones sexuales, además de prevenir así otras enfermedades de transmisión sexual. Si al final decides usar condón, toma nota y úsalo con espermicida con nonoxinol 9.
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