Hoy en día, a pesar de los muchos avances tecnológicos, la medicina aún tiene la capacidad de sorprendernos. Es el caso de las nanoagujas, diminutas agujas microscópicas, capaces de fabricar nuevos vasos sanguíneos que permitirán que los órganos dañados puedan “auto-repararse” por sí mismos o contribuir a que los nuevos órganos trasplantados se desarrollen sin complicaciones. Hoy, en Club Salud, analizamos las posibilidades de esta novedosa aplicación quirúrgica que puede ayudar a muchas personas a mejorar su calidad de vida.
La utilidad, y esperanza futura, de las nanoagujas es promover la generación de nuevos vasos sanguíneos, como bien mencionábamos. Estas “diminutas herramientas”, mil veces más pequeñas que un cabello humano, funcionan a partir de la deposición, o entrega, de los ácidos nucleicos a un área específica. Los ácidos nucleicos son los componentes básicos de todos los organismos vivos, y tienen como fin la codificación, transmisión y expresión de la información genética, y ahora podrían usarse para reprogramar las células.
Las nanoagujas actúan como esponjas que cargan el ácido nucleico y lo entregan sin dañar o matar la célula porque pueden penetrar en la célula sin pasar (sin destrozar) la membrana que la recubre. Por otro lado, están hechas de silicio biodegradable que no deja residuos tóxicos en el organismo, ya que se degrada en sólo dos días. Y, además, no causan inflamación y/o efectos secundarios, tan característico de otras intervenciones.
Por el momento, las pruebas se han realizado con éxito en animales. Ahora bien, ¿es posible iniciar los ensayos en humanos? Molly Stevens, del Imperial College de Londres, opina que, quizás, aún existen algunos obstáculos que superar. Según sus declaraciones: “Estamos en los inicios de nuestra investigación, pero es un gran paso que las nanoagujas hayan tenido éxito en ratones. (…) Aun así, creo que tienen un enorme potencial para ayudar a nuestro cuerpo a repararse a sí mismo”.
Ahora, los investigadores trabajan en el desarrollo de un “vendaje” flexible que se incorporarán a las nanoagujas para aplicarlo, interna y/o externamente, en diferentes partes del cuerpo y que permitirá administrar la cantidad necesaria de ácidos nucleicos, listos para reparar e iniciar la reprogramación celular.
En Club Salud estamos muy emocionados por conocer los avances de esta investigación que, de seguro, supondrá un gran avance para la prolongación de la calidad de vida.